¡Hola! Me presento. Hace tiempo tenía ganas de hacerlo, aunque, bueno... en realidad no. Esta es la parte que me da entre vergüenza y vagancia. Pero supongo que debería, ¿no?
En fin... me llamo Ana Inés, aunque ni mi peor enemigo me dice así. Para todo el mundo, simplemente Anita.
Terminé el colegio allá por 2007. Comencé a estudiar diseño gráfico, pero lo abandoné rápidamente. No fue porque no me gustara; la verdad es que aún no lo tengo del todo claro. Probablemente se debió a una serie de eventos.
Al año siguiente me anoté en la carrera de Bellas Artes. No la terminé: te debo cinco materias y la tesina. Sí, ya sé...
Mientras estudiaba, trabajaba como manicura. Lo que comenzó como un hobbie para juntar algo de plata para salir con mis amigas o viajar terminó siendo mi trabajo durante 13 años.
No es que mi vida pueda resumirse en ítems, pero tengo que hacer un esfuerzo para ser breve, al menos en esta presentación.
En 2023 llegó Borja a mi vida, y las cosas cambiaron: mis intereses, la forma en que me veía en el futuro y lo que quería hacer a partir de entonces.
Soy la chica de los mil cursos y emprendimientos. Hasta ahora el único que prosperó fue mi bolichito en calle French, donde hacía uñas. Pero algo cambió en mí.
Siempre disfruté cocinar y comer. Sobre todo lo segundo, así que, a esto me lo debía.
Un poco por gusto y mucho por circunstancias de la vida, es que elegí este camino de lo que ahora llamo “Pastelería alternativa”.
Así que, acá estamos: planificando, experimentando y encontrando (me).
Solo puedo decirte que, si llegaste hasta acá, quedate. Algo lindo de todo esto va a salir.